Texto publicado por Ana López

Cruda, en zumo, en compota, en almíbar, papillas...

Reduce el presupuesto y gana en salud

-La pera se vende a buen precio. Aporta azúcares y, además multiplica el aporte en fibra por 5.
-Si quieres perder peso o mejorar el control de la glucosa en sangre, elige la pera.

El laxante más inocuo

-Riqueza en agua y fibra
-Laxante natural
-Apto para personas de cualquier edad
-Ayuda a los intestinos
-Se puede añadir a recetas saladas, ensaladas, cremas, o en yogur con la piel.

Libre de sustancias de desecho

-Obligada presencia en las dietas depurativas
-Una de las frutas con más pectina
-Fibra soluble que depura el organismo
-Elimina toxinas, metales pesados, etc
-Reduce la absorción del colesterol a nivel intestinal

En periodos de debilidad

-La pera es la protagonista en las primeras papillas de fruta para niños.
-Ligera, digestiva y remineralizante, aumenta el nivel de energía y vitalidad a la vez que refuerza las defensas.

Un antihistamínico natural

-Si se come con piel, destaca su riqueza en quercitina, un fitonutriente de propiedades antivíricas, antihistamínicas y antiinflamatorias, aconsejable en caso de asma, alergias respiratorias y dolor articular.

Menopausia bajo control

-La pera atenúa las molestias de la menopausia y reduce el riesgo de sufrir cáncer de mama.

Protección anticancerígena

-Esta fruta neutraliza el efecto de algunas sustancias potencialmente cancerígenas.
-Con este fin tómala licuada con remolacha.

-Aparte de ser más barata, las peras frescas superan el aporte en potasio de las enlatadas en almíbar.
-Las personas hipertensas deberían optar por las primeras.

Aparte de todo esto la pera está al alcance de mucha gente ya que es una de las frutas más comunes.