Texto publicado por Azucena

Intento de metáforas-
Como cual amanecer rodeado de felices aves que le cantan a la luz del día, la llanura aún me aguarda con apacible ternura cual fuese el recuerdo presente de aquella fiel amiga.
Si entre la agrupación de simios, al líder mayor, no le existe la cohesión, por más que se desee una identidad colectiva, predominará ese individualismo que se escucha sonar, hasta en la hojarasca que el viento pasea por encima del suelo.
la simpatía no se da, es como decir que a los grillos, no les gusta competir con su cántico ante la abrupta y para ellos estruendosa sacudida de un tronco, en que se alojan sus vidas.
Durante la noche, gritarle al silencio es hacerle una complementaria compañía, que no se extiende más de lo que este perdura.
Desconozco si la tristeza y la soledad son amigas, pero lo que si pienso, es que quien les proporcionó una definición conceptual, tal vez fue quien durante mucho tiempo permaneció como una casa teniéndolas como asiduos huéspedes, sin siquiera haberlas invitado a celebrar aquella fiesta de cumpleaños a la que nadie quiso asistir, por pensar que se trataba de una broma.
Triste, triste, como cuando el cielo llora y no de alegría, justo en ese momento en que la misma naturaleza enseña lecciones a las hermosas aves, quienes para protegerse del frío y la lluvia, buscan apresuradamente un refugio donde poderse salvaguardar, de los tiempos de tempestad.

Pensamientos
En la amargura de una lágrima, se encuentra el lamento de la palabra que no existió, cual sonido silencioso que lastima en su pasar.
Quiero un abrazo sincero, que me recuerde que aún puedo sentir, sin temor a tener que aceptar que sólo fue una imaginación, porque realmente no está.
Caminando sobre la vereda, escucho mis pasos que acompañan el andar el camino de la historia, que forma parte de un soñar en una realidad. Inmenso bosque sombrío que vigila mi pensar, en la espera de un llegar, cual recoge los residuos del incompleto fragmento de aquel pronunciar.
No tengo más que un hoy, cargado de un porqué en conjunto con el Ser de una identidad que fue, que tal vez será, pero que hoy existe predominante ante cualquier ayer, o posible mañana, y aunque el futuro se planea, el que se vive es el hoy, ya sea a placer, derroche, o simplemente a la autosatisfacción personal.
Todos los días vivo al máximo mi presente, sin olvidarme de construirme un futuro, porque el sentido verdadero del hacer, es encausarse sobre lo que conduce al objetivo, que no sólo es desear las cosas, sino hacer los mejores esfuerzos que se pueden para lograr el cometido.
Sólo puedo decir que soy un ser pensante y emocional, que vive día a día construyéndose un mejor ahora, valorando los excelentes detalles recibidos, que aunque puedo actuar en base a mi pensar, también puedo sentir, pero sin olvidarme de los principios con que rijo mi identidad; de ninguna manera me gusta dañar, y prefiero una lastimosa verdad, a infinidades de mentiras, que al final hieren más.
Tanto en mis sueños y mi realidad, quisiera una humanidad donde predominara la paz, que la maldad de los unos, no dañara a los demás. Que en vez del resentimiento existiera la solidaridad; que en lugar de la mentira sólo estuviera la verdad, que no se necesitara del bien y del mal para equilibrar la tan subrayada dimensión de la vida; empero, claro está que estas ideas son sólo parte de un guajiro soñar, que probablemente alimenta una fantasía, un criterio iluso, y que la realidad es sobre vivir para vivir en cualquier aspecto que fuere.