Texto publicado por Carinosanto
Diez consejos, para que el Amor dure.
Es un estímulo que desencadena bienestar y placer. Claves para el buen funcionamiento emocional.
La comunicación y compartir intereses en pareja son claves para mantener la relación.
“Ay, el amor, cosa tan rara...”, decía una canción de los años 60; y aunque ahora es uno de los temas más estudiados, no parece haber datos definitivos sobre lo que en últimas termina causando la magia del enamoramiento.
Lo cierto es que este estado, sentimiento o condición atraviesa de alguna manera la vida de todas las personas. El amor es una necesidad psicológica profunda; incluso, va más allá, según lo evidencian serias investigaciones científicas.
Tiene la función biológica de activar los sistemas de recompensa del cerebro, a través de la acción fascinante de un neurotransmisor llamado oxitocina. Estar enamorado actúa como un estímulo que desencadena la sensación de bienestar, euforia y placer, insumos necesarios para el buen funcionamiento emocional. (Además: El amor en los tiempos de internet y redes sociales)
Pero que el amor dure y se mantenga en el tiempo es aún más indescifrable. Lo que parece cierto es que es la mezcla de muchas cosas. Este fenómeno emocional se va construyendo, lo vamos aprendiendo a lo largo de nuestra existencia a través del compartir, el conocimiento, la comunicación y otras habilidades como la comprensión, la flexibilidad, la empatía, el optimismo o la gratitud
1. Superar la primera fase del enamoramiento
Una vez ha pasado la euforia emocional, que muchos ubican entre 13 y 18 meses, establecer vínculos y pasar al amor verdadero es toda una ciencia. Una clave es no quedarse instalado añorando la diversión, el regocijo y el disfrute de la etapa de enamoramiento, que cambia a medida que se avanza en la convivencia.
2. Tener en cuenta las necesidades del otro
El amor se da en la interacción y crece cuando se comienza a entender, reconocer y aceptar la existencia de las necesidades de la pareja. Cuando cada uno es capaz de salir de sí mismo para ponerse en los zapatos del otro, la capacidad de amar podrá expandirse y hacer crecer la relación.
3. Generar confianza
La capacidad para adherirse a la empresa del otro está en sentir, expresar y actuar de tal manera que la pareja sepa que puede contar con su apoyo en los tiempos importantes en la vida. Es poder decir “cualquier cosa que te pase a ti también me pasa a mí”.
4. Ver en perspectiva los problemas y las dificultades
Aceptar creativamente los cambios de cada etapa, las crisis que van apareciendo o los acontecimientos difíciles. Bajarles la intensidad a los problemas y declarar “zonas libres de conflicto” para desligar las tensiones de los buenos momentos son acciones efectivas que aumentan la posibilidad de permanecer más tiempo juntos.
5. Disfrutar la cercanía física
Alguna vez leí que el secreto de una pareja feliz son 4 abrazos al día. Aunque un poco simplista, puede ser cierto. El amor se alimenta también con la cercanía física, que implica la sexualidad, pero también, mil expresiones que las parejas tienen para mostrar de diferentes maneras la preferencia por el otro y la exclusividad que lo hace especial.
6. Aumentar la satisfacción
Con frecuencia escucho a las parejas decir que se sienten más cerca del otro después de salir de viaje. Hacer algo diferente rompe la rutina, amplía las posibilidades de disfrute, distrae de las preocupaciones cotidianas y refuerza la idea de placer. Algunos, incluso, hablan de las propiedades adictivas el amor, que en el buen sentido resulta ser muy positivo.
7. Poner en práctica habilidades de interacción
Cooperar con la pareja en lugar de competir, expresar sentimientos amables, tiernos y considerados, escuchar para entender, respetar la diferencia y trabajar para facilitar y promover el desarrollo de la pareja son fundamentalmente importantes para las relaciones a largo plazo.
8. Alinear expectativas
Sincronizar lo que esperamos cuando decidimos vivir juntos, con lo que va ocurriendo en el camino, lleva a encontrar afinidades. Entre más similitudes tengamos mayores probabilidades de compartir y estar más cerca.
9. Crear y mantener la fuerza de los rituales
Los rituales son una manera de transmitir y perpetuar el amor. Las prácticas habituales que se realizan para recordar, disfrutar o recrear situaciones amables, afectuosos y entrañables fortalecen los lazos de unión en la pareja.
10. Cuidar el espacio personal
Dejar tiempo y espacio para que cada uno pueda seguir teniendo satisfacción personal en aquellas áreas que no comparte con su pareja permite que, dentro del marco de la relación, cada uno construya un proyecto de vida propio. Lo que a su vez aumenta las posibilidades de compartir el proyecto conjunto.