Texto publicado por TTS Fer

Cuando termino de comer, llevo mi plato, mi baso y mis cubiertos a la cocina, lavo todo muy bien, con agua caliente y detergente, muy bien enjuagado y con 0 rastros de comida, y finalmente los dejo secarse en el seca platos. A veces incluso lavo, muy buen hijo, los platos de mi mamá y Pepe, pues están muy cansados y prefieren tirarse a continuar la película que estaban mirando, siempre sin quejarme como una buena criada. Lo hago para que no me jodan, me gustaría levantarme de la mesa al terminar, y encerrarme en mi cuarto nuevamente sin siquiera llevar las cosas a la cocina, como en otra vida.
En algún momento, por ejemplo al levantarme a la mañana, guardo muy bien los platos y vasos en un mueble (ya secos por supuesto) y los cubiertos en una cajonera, muy bien ordenados. Lo hago para que no me jodan, me gustaría hacerme directamente el café, sin guardar nada, como antes de que me lo empezaran a pedir.
Al hacerme el café, de mala gana agarro un paquete de galletitas si en ese momento está Pepe en casa, y como al menos un par. Lo hago para que no me joda, para que no me regañe por no comer nada con el café, siendo que estoy comiendo sin ganas, con más sueño que hambre, y luego al mediodía sin ganas de almorzar. Me gustaría hacer mi prohibido café con chocolate y crema y tomarlo solito, como ciertas veces que amanezco solo en casa.
Fines de semana al mediodía, no tengo ánimo para moverme, ir a la cocina y preparar algo. Sin embargo, me preparo alguna pavada, para que no me jodan. Me gustaría estar solo y entonces husmear la cocina con mayor libertad, salir a comprar si es necesario, y comer lo que yo quiera.
Cuando está lindo l día, en cierto momento de la tarde salgo a tomar un poco de aire y dar vueltas, pues tengo el culo muy pegado a la silla en mi escritorio, acá en mi cuarto. Lo hago para que no me jodan, pero he de reconocer que estando un tiempo a fuera me encanta la sensación de salir de la computadora y respirar aire.
Un amigo me llama, necesita salir conmigo, yo no estoy de ánimo. Sin embargo, salimos para que no me joda, me gustaría quedarme en casa rumiando vaya a saberse qué cosa, o prefiriendo salir con una amiga.
Ciertos amigos cuando los llamo para salir no tienen tiempo para mí, pues trabajan, estudian, tienen sus compromisos. Les digo de mala gana que no importa, será otro día. Por dentro me cago en todo. No muestro esos sentimientos para que no me jodan, me gustaría tener el coraje para decirles que por favor y sea lo que sea que tengan que hacer, se toman el día para mí.
A finales de enero busqué una actividad para hacer durante el verano. Lo hice para que no me jodan, para que no se lamenten porque me la pase sin hacer un carajo, todo el día en la computadora. Yo solo, adultamente, hablé con una antigua acompañante terapéutica y gran amiga mía que también canta, le pedí que me presentara alguna colega que me pueda dar clases de canto. Tuve suerte. Me agradó mucho volver a practicar un arte que amé desde pequeño y que por circunstancias de la vida tuve que largar durante años.
Cuando no estoy solo en casa, me limito a permanecer en la computadora, con algo de suerte salir con alguna amiga si puede y yo también, no hablar por nadie mediante la voz por WhatsApp ni Skype, no tocar ni mi pianito chiquito ni mi teclado grande, no practicar canto, no hacer ningún sonido más que lo justo y necesario. Lo hago para que no me jodan, pues a Pepe le molesta, a mi mamá ciertas cosas también, no tengo la privacidad y mucho menos intimidad que quisiera. Me gustaría estar solo, hacer todo aquel desmadre que me tuve que guardar y no pude hacer. Que mi mamá y Pepe no llegaran, y que yo entonces pudiera charlar boca a boca con cierta gente aquellas cosas que solo podría en soledad, pues de lo contrario me escucharían y causaría una catástrofe.
Cuando voy al baño hago mis necesidades y salgo. Lo hago para que no me jodan, me gustaría quedarme, masturbarme, llegar al orgasmo que a menos que esté solo no puedo llegar, pues me apuran a salir, somos 3 en la casa, y yo me la estoy frotando como si viviera solo.
Cuando me doy una ducha, me ducho todo el cuerpo muy bien, me lavo lo mejor que puedo la cabeza, pues tengo caspa, me lavo muy bien dentro de los oídos, ya que al usar audífonos acumulan más cera, y salgo en cuestión de minutos. Lo hago para que no me jodan, me gustaría quedarme bajo el agua por más tiempo, disfrutar de ese chorro muchas veces placentero.
Me ducho un día por medio, muchas veces de mala gana. No siempre es así. Varía mucho en mis estados de ánimo. Si voy a ver a una amiga, o salir a cierto lugar en el que tengo que estar más o menos presentable, sí me ducho a diario, me lavo muy bien los dientes. Pero si estoy bajo de ánimo, no tengo ganas. Estando desanimado, si una amiga quiere salir conmigo, o lo que sea, que me aguante sucio. Por supuesto, si mi olor a chivo ya se pone inaguantable, o mi cabello tiene una grasa y caspa indigna de mí, me doy una ducha por menos ganas que tenga.
Cuando termino de cagar, al tirar la cadena hecho mucho desodorante de ambiente. Lo hago para que no me jodan, me gustaría salir del baño dejando todo el olor a mierda regado.
Cuando ensucio sin querer algo, o si encuentro un sector de la casa sucio, lo limpio lo mejor que me sale. Lo hago para que no me jodan, no me gusta limpiar, me gustaría ser indiferente a la mugre que a veces incluso me hacen tocar y limpiar.
Sin embargo, sé que todo lo que me piden que haga, al menos la parte de los quehaceres domésticos tiene en un futuro, que yo me desenvuelva muy bien cocinando, limpiando, lavando, en la futura casa que tenga. Mi época de rebeldía ya pasó, hoy día hago todo esto que me piden y me doy cuenta que al fin y al cabo me gusta más de lo que en otra vida pensaba, que si bien no tengo energía o ganas, he de colaborar en casa, ya que en verdad quiero vivir solo, o con cierta chica, sea la que tenga que ser, y a esta altura de mi vida sería una vergüenza vivir todo vago, sucio, desorganizado.