Texto publicado por Irene Azuaje
Venezuela: Bitácora De Una Nación En Crisis VI
por Lehna Valduciel
Leopoldo López: Histrionismo O Liderazgo
Puesto que sé que este es un punto de susceptibilidad para muchas personas, me gustaría aclarar que, la intención de este texto no es atacar la figura de este político venezolano, solo pretendo ofrecer mi punto de vista respecto de sus actuaciones, que no de él como ser humano.
Lo primero que debo señalar, es que diga lo que diga el gobierno, Leopoldo López es un preso político, condenado a casi 14 años de prisión en teoría por sucesos ocurridos en 2014 donde fallecieron algunas personas y, de los cuales hace poco la exministra de asuntos penitenciarios endilgó la responsabilidad —culpabilidad, en realidad— de las muertes, a un señor —por llamarle de alguna manera— apellidado rodríguez torres.
¿Quién es para mí Leopoldo López?
Pues es un joven venezolano que tuvo un buen papel durante su gestión como alcalde del municipio Chacao de la ciudad de Caracas, bastante carismático, que, bien a título personal o bien por asesoría, decidió tomar un rumbo propio en 2014 proponiendo la fulana “Salida”, lo que en mi opinión comenzó a fracturar al bloque democrático.
Algo que observo en el político venezolano, no solo en López, es una tendencia al individualismo y a la persecución de objetivos muy personales que, al menos en este momento bajo mi punto de vista, están muy fuera de lugar. Es como si les picase el gusanito del liderazgo y se les olvidase que los verdaderos líderes de movimientos del tipo que sean, no se imponen, casi siempre surgen solos. Y a diferencia de lo que muchos observan en López, yo dejé de apreciarlo como un líder natural hace mucho tiempo. Que es un hombre que ha trabajado mucho, que cuenta con mucho carisma, sí; eso es innegable; pero para mí, el carisma solo es una pequeña parte de lo que implica ser un verdadero líder natural.
En todo caso —mejor no divagar demasiado que aburre—, resumir diciendo que, desde mi punto de vista, la salida fue un error estratégico de López que lo único que consiguió fue darle más tiempo al régimen de Maduro.
De ahí en adelante, mucho se ha intentado decir en torno a la figura de este político, pero, no sé yo hasta qué punto habrá calado en realidad como líder principal de la lucha democrática. Hay que tener en cuenta que, que él y su esposa tengan seguidores y afectos, no lo convierte en líder absoluto. La verdad, al menos para mí, las actuaciones de López y su esposa vienen dejando mucho que desear.
Comprendo —y hago el ejercicio de empatía para no ser tan dura—, que ser condenado de manera injusta es difícil de asumir; también entiendo que estar privado de libertad, en las peores condiciones —o al menos es lo que se dice—, que el aislamiento, la supuesta tortura, no ver a tu familia, tus hijos y tu esposa debe ser durísimo. Lo mismo del lado de su esposa.
No obstante, hay cosas que a mí nunca me han terminado de cerrar respecto de la situación de López y todo lo que su esposa y familiares declaraban.
¿Por qué?
En primer lugar, porque por instinto yo nunca creo en todo lo que me dicen de buenas a primeras. Por otro lado, la ceguera me impide juzgar ciertas cosas por mí misma y solo cuento con la descripción de terceros que, no siempre es objetiva y absoluta; pero más allá de todo eso, es que a mí, eso de que me digan que un privado de libertad es torturado sicológicamente, que está aislado, pero, sale en videos; se pautan reuniones con periodistas de cNN y demás asuntos que, no voy a ventilar porque sería larguísimo; y el hombre aparece en condiciones contrarias a lo que se expresa, pues, disculpe usted estimado lector, pero a mí no me cuadra.
Y sí, de todo puede haber tras las actuaciones de Leopoldo López y su esposa; debido a que carezco de información, no entraré a especular demasiado y procuraré exponer y preguntar —como para evitar que muchos quieran cortarme la cabeza—.
Haciendo un salto temporal hacia adelante, comentar que hace una semana le fue dictada una medida sustitutiva a López de casa por cárcel, que no liberación, por favor, por parte del TSJ, quien argumentó problemas de salud e irregularidades en el expediente del caso.
¿Casualidad? O el trapo rojo perfecto para matar dos pájaros de un tiro: Fastidiar a la fiscal y redirigir la atención internacional hacia el caso de López, buscando opacar el escándalo que originó el asalto a la Asamblea Nacional el 5 de julio.
Saque usted sus conclusiones, que eso no duele.
En realidad, considero que, si es demostrable que el hombre tiene problemas de salud, lo lógico es dictar dicha medida. Caer en teorías conspiranoicas ya no viene mucho al caso —y vaya si surgieron teorías de todo tipo—. Lo que sí creo relevante es recordar, que López es uno más de los más de 400 presos políticos y que, haber logrado que tenga una medida sustitutiva no es un logro extraordinario; es el deber ser en un sistema democrático que vele por los derechos humanos y, en el que, de seguro, de existir en la práctica, no estaría privado de libertad por crímenes que no cometió.
Ahora bien, mucho se ha discutido y especulado respecto de si su traslado desde ramo Verde fue producto de una negociación o no.
Aquí en serio yo me pregunto: ¿Cabe la menor duda?
La negociación, le disguste a quien le disguste, es una estrategia para alcanzar cosas; mucho más en situaciones de crisis como la venezolana. De quien es producto la negociación, a quien hay que darle las gracias no es tan importante como el hecho de repetir las negociaciones para el resto de presos políticos, ¿se entiende?
A mucha gente le reventó siquiera pensar que López fuese trasladado producto de una negociación; a mí, lo que en realidad me molesta, es que se nos quiera ver la cara de idiotas. Y lo digo así, porque que la esposa de López declare que no hubo negociación, y luego agradezca a Zapatero y sus conversaciones/gestiones, me parece una falta de respeto a la opinión pública. Hay quien la juzgó duramente por haber agradecido a los hermanitos rodríguez que son, parte del régimen. En este punto decir, que a mí me resultó de mal gusto que lo hiciese, pero, puede ser parte de la negociación y no lo sabemos, por ejemplo. Y no, no busco defenderla. Solo creo que es una posibilidad que explica que lo hiciese. Eso de querer justificar lo que hizo diciendo que: “es que le mandaron al marido preso por más de 3 años a la casa y por eso está agradecida”, me parece ridículo y lo siento si alguien se ofende, pero es la verdad. No olvidar por favor que días antes, la misma Tintori declaró que no aceptarían dicha medida.
Y eso de querer justificar sus declaraciones diciendo que ella no es política; a ver, criaturitas del reino… Ella puede no ser política de profesión, pero desde que su esposo entró en política, ella ha tomado parte activa; así que, de hecho, ha asumido su rol en la política, le disguste a quien le disguste que se señale tal cosa.
Acá no hay que darle tantas vueltas. La mujer metió la pata hasta el fondo y ya está. No será la primera ni la última en cometer errores tácticos en política, ¿no?
Digo yo que se le notaría de alguna manera si estaba obligada a dar dichas declaraciones y, siendo todavía más crítica, si estás obligada no te ofreces de lo más amable a trabajar en conjunto. Y nótese que subrayo lo de la amabilidad. Es un tema de analizar no solo lo que se dice, sino la forma en la que se dice.
No es posible que se siga siendo flexible ante las metidas de pata — y Tintori tiene en su haber unas cuantas—, solo porque ella es la esposa de un político conocido; mientras que con la gente de a pie —como la madre del joven Vallenilla, asesinado en los predios de la Base Aérea de La Carlota— se aplica la mano de hierro. Un poquito de por favor, ¿no?
Pasando a otro punto del caso López que, a mí me hace más ruido que una tumbadora en una iglesia, me gustaría preguntar:
¿cuál es la manía de hacer creer que López tiene en sus manos la dirección del conflicto venezolano?
¿En serio creen que si mañana López dice: ¿vayan todos a su casita y no protesten más, se acaban las protestas? señores, yo no lo tengo tan claro y la prueba es, que, de un tiempo para acá, hay muchas personas que protestan así no haya convocatoria por parte de la MUD. De paso, me parece una total falta de respeto al pueblo venezolano demócrata, pensar que, porque un hombre al que pretenden designar líder hable, todos los venezolanos vamos a decir amén.
También me resulta ruidoso, que, estando el hombre en su casa, privado de libertad y con restricciones, reciba visitas de un gentío y encima, si se le prohíben se arma un escándalo de marca mayor.
Señores, criaturitas del reino, que el hombre sigue preso, ¿eh? Que lo que ha cambiado es el recinto, no las restricciones, digo yo.
Ah, que López ha tenido mucha publicidad, sí, eso es innegable. Que lo hayan trasladado por la razón que sea, también.
Ahora, no sé yo si este sea el momento de armarse un lobby político, la verdad.
Y desde luego, algo con lo que estaré siempre en contra —se llame como se llame— es transformar a un político en una especie de mesías salvador que nos va arengando como borregos de un rebaño enajenado. Y eso es, al menos en mi apreciación lo que algunos andan intentando con López.
López es un político más, un privado de libertad con medida sustitutiva más; López no es el líder absoluto del pueblo venezolano, y desde luego no es, el Mandela venezolano, como he oído comentar por ahí.
Y por supuesto, aunque a más de uno le choque la observación, lo de López no puede convertirse en una distracción sobre lo que sí es en realidad importante: La desobediencia civil, la lucha contra el régimen dictatorial de Maduro.
Señores, bájense de esa nube, que este no es momento para andar fantaseando.
En la próxima entrega: ¿el pueblo dice no a la constituyente?
Lehna Valduciel | 15/07/2017 en 09:01 | Etiquetas: Reflexiones, Situación País, Venezuela | Categorías: Bitácora de Anécdotas y Reflexiones | URL: http://wp.me/p4Osgg-cB