Texto publicado por la licenciada San Miguel

¡Hola, amigos de blindworlds!
Seguramente, cuando veáis el título de esta publicación, os vendrá a la mente una famosa canción de Chiquetete que tiene el mismo título. Lo he hecho así de original para hablaros del hecho de esas amistades que cuando se enfadan, se despiden a la francesa.
Una persona madura, y con esto me incluyo, cuando se enfada con otra, intentará llamarla por teléfono para hablar de la cuestión que los ha separado. Si alguno de los dos interlocutores no puede atender el teléfono, lo más conveniente sería negociar en quedar a una hora que les venga bien a ambos. Pero no, la cobardía llega cuando uno se enfada, no coge el teléfono al otro y, encima, no da motivos de por qué se ha enfadado. Este tipo de personas se piensan que la otra persona tiene poderes de adivinación y que pronto sabrá el motivo de esa triste separación. Pues no, amigos, las cosas son más fáciles, y negociar para hablar del tema es muy sencillo, no sé por qué la gente no emplea ese método.
Otra cosa que hace que estas personas sean más cobardes es el hecho de no contestar a los correos ni a los whattsapps ofreciendo alguna explicación. Cuando eso sucede, hay un engaño por parte de ellas. Un engaño nefasto, indecente, inhumano y rastrero. Estas palabras son las que usé hace dos semanas con Marcos Llorens, mi amigo ciego de Castellón, ya que yo intentaba explicarle que estaba haciendo mis trámites para matricularme en la universidad de Valencia, ya que es allí donde este año empezaré mis estudios de fisioterapia. Es cierto que a Marcos no le gustó que yo le nombrara en un artículo que publiqué para el periódico de Alcoy, pero todo esto se puede solucionar. Yo he hecho lo posible por no perder a Marcos, haciendo lo que él me ha dicho que haga. Por ejemplo, antes le escribía cada dos días. Llevo tiempo sin saber de él, y solo le escribo una vez a la semana. Esta semana he dejado de escribirle y la pasada también. Por otro lado, yo le agradezco que haya hecho que yo me enamore de Alcoy, y me costó cinco meses convencerlo de que deberíamos quedar. a solas no me atrevo, por lo menos las primeras veces, para no dar lugar a malas interpretaciones. Pienso que las primeras veces deberíamos quedar con alguien más, que nos conozca a ambos. Al haberse negado varias veces a esta sugerencia, le dije a una amiga que intercediera entre ambos, cosa que a él le molestó. Por una vez quedamos a solas, y fue poco tiempo. Ah, pero por lo menos supe que estaba bien. Y a parte de pasarme esto con Marcos, me ha pasado con varias personas más. Lo malo es cuando te pasa esto con una persona con la que tienes que trabajar en equipo. Esto me pasó en Alcoy un fin de semana de abril de este año. Un amigo me tenía que esperar en una parada de autobús para ir a un colegio, y no me cogió el teléfono durante todo el fin de semana. borró mi número, e incluso, por un grupo de whattsapp, la dijo a una de nuestras compañeras que me dijera que se había retrasado el autobús y que llegaba tarde. Otra actitud de cobardía que se suma a mi lista. Menos mal que yo lo leí y yo ya había llegado a ese colegio antes que él, Pero podría haber conservado mi número antes de enfadarse. menudo fin de semana pasé, entre este tío de Alcoy que no me contestaba el teléfono y mi amiga intentando mediar con Marcos, sin éxito. en fin, no hagáis eso, que puede llegar a molestar. Y me pregunto por qué la gente es tan cobarde.