Texto publicado por la licenciada San Miguel

¡Hola, blinderos!
Después de la tempestad, vengo con algo instructivo hoy. Se trata del hecho de pegar.
La mayoría de los padres pegan a sus hijos cuando se ponen rebeldes o cuando hacen algo que está mal. La verdad es que con este hecho yo no estoy de acuerdo, porque pienso que una madre o padre que riñe a sus hijos en público da mala imagen, porque las cosas se pueden solucionar hablando tranquilamente, sin necesidad de recurrir a los bofetones y a los gritos, y a nadie le importa si tu hijo se ha portado mal. Por eso, lo mejor es que sea el niño el que dé la imagen inconscientemente y que sean los padres los que cojan al niño en casa y tengan una charla con él haciéndolo razonar sobre su mal comportamiento.
Por otra parte, los niños imitan lo que ven, y esa imitación se traslada fuera, cuando en el colegio pega a su compañero cuando no le deja el juguete, o cuando le obliga a jugar y el otro amigo no quiere. En mi caso, yo no le diría a mi hijo que pegara si ve que uno le pega. Pienso que lo mejor es que salga corriendo y se lo diga a su profesor para que sea éste el que interceda en la resolución del conflicto. bueno, aunque eso les funcionará en los cinco primeros años de escolarización, por lo menos. cuando mi hijo ya tenga un poco de uso de razón y vea que alguien le pega, le diría a mi hijo que le conteste a su compañero: "tus padres no te han educado bien. Deberían haberte enseñado a que no se tiene que pegar".
Me gustaría que esta sea una nueva generación. Una generación donde la violencia no tenga que intervenir, tanto en el lenguaje como en el uso de las manos. El lenguaje tiene que ser bien usado si queremos recoger buenos frutos.
Otro asunto que trato aquí es el hecho de que los profesores o los padres usen formas como: "Eres un vago", "te comportas como un niño pequeño". "qué inútil eres", "qué cara más dura tienes". La forma correcta de decirlo es: "Esta actitud no me parece propia de tu edad". "Deberías esforzarte más porque vales un montón", "Toma nota de lo que te he dicho y algún día llegarás a entenderlo". Y luego, hay gente así que encima les dice a sus hijos o alumnos que tienen que portarse con diplomacia con los funcionarios públicos, clientes, compañeros, etc.
Espero que os gusten estas reflexiones.