Enlace publicado por Jose Ignacio BW
Las redes sociales hacen el mundo más pequeño
Cualquier usuario de Facebook sólo necesitaría dar cuatro pasos para contactar con otro, aunque viva en sus antípodas. Un estudio publicado ayer, que analiza las relaciones de 721 millones de habituales de esta red social, revela que la distancia media entre dos cualesquiera es de 4,47 grados. Este hallazgo recorta en dos la popular teoría de los seis grados de separación.
Fue en 1929 cuando el poeta Frigyes Karinthy propuso la idea de que dos personas, sin importar lo separadas que estuvieran físicamente, están conectadas por seis lazos de amistad como mucho. En 1967, el psicólogo social Stanley Milgram, famoso por sus experimentos sobre la tortura y la obediencia debida, quiso comprobar la idea de Karinthy enviando postales a una serie de personas sólo usando conocidos directos y vio que sus estimaciones eran correctas: sólo había que dar seis pasos para llegar hasta el receptor. Ahora Facebook ha reducido aquellos seis grados de separación a cuatro.
Usando la enorme base de usuarios activos de la red social (721 millones en mayo de este año), investigadores de la Universidad de Milán han establecido que existen 68.700 millones de relaciones de amistad entre ellos. Con potentes ordenadores, los científicos han calculado que el 92% de los miembros de Face-book están conectados por cuatro grados (habría que dar sólo cinco saltos). El dato baja aún más si sólo se cuentan las relaciones dentro del mismo país. En el caso de encontrarse en España, por ejemplo, cualesquiera de los más de 15 millones de registrados están conectados entre sí por sólo otras tres personas.
Como explica Sebastiano Vigna, uno de los autores del estudio, esto no significa que Milgram o Karinthy estuvieran equivocados. "En primer lugar, la creencia popular es que el número máximo de grados de separación es de seis. Y nosotros nos hemos encontrado con personas que están separadas más de 30 grados. Sin embargo, los experimentos de Milgram hablaban de la media y hemos visto que, de promedio, con cuatro grados es suficiente".
Además ellos jugaban con ventaja. "Facebook tiene un conocimiento completo de la red. La gente en el experimento de Milgram envió las postales haciendo su mayor esfuerzo, pero ellos no sabían si su elección del mejor intermediario era la correcta. Esperábamos un número menor, pero no tanto", explica. Otra de sus ventajas era que contaban con sofisticados algoritmos, potentes ordenadores y una muestra que representa a más del 10% de la humanidad y no los 263 voluntarios que usó Milgram.
Poco aislamiento
Facebook también dio a conocer ayer otra investigación, realizada en paralelo con la anterior, sobre la anatomía de la red social. Entre sus datos destaca que la media de amigos que tiene un usuario es de 190. Sólo unos pocos, el 10%, están tan aislados como para contar sus amistades con los dedos de la mano. Pero como hay mucha desviación típica es mejor hacer caso a la mediana, que reduce la cantidad de amigos a 99. Por otro lado, se produce la paradoja ya detectada en otros estudios, que revela que la mayoría tiene más amigos que uno mismo.
Pero la red global tiene un lado local poco estudiado hasta ahora. El 84% de las relaciones se establecen dentro del mismo país. Las excepciones a esta variable geográfica se deben a razones históricas, de idioma o culturales. Así, los contactos entre los usuarios españoles y latinoamericanos predominan sobre los que se mantienen con los europeos.
Este peso de lo local sobre lo global podría cuestionar la teoría de los, ahora cuatro, grados de separación. Sin embargo, el análisis de la evolución de la red social muestra que, a medida que se ha ido expandiendo en los últimos cinco años, los pasos entre dos usuarios cualesquiera se han reducido. En un futuro donde los 7.000 millones de habitantes del planeta estén conectados, ¿la separación entre ellos se reducirá? No necesariamente. Si se revisan las gráficas del estudio, hay una tendencia a la estabilización. "No creo que vayan a bajar de cuatro", responde Vigna.
Fuente:
MIGUEL ÁNGEL CRIADO23/11/2011
Público,es