Texto publicado por Melany Gachicha Gómez
¡Merecidas vacaciones!
Esta publicación debí haberla hecho el viernes pasado, pero no lo hice puesto a que estaba concentrada en otras cuestiones y andaba de pasada por Blindworlds.
El viernes fue mi último día de clases, y en mi escuela, eso se festejó, como es de esperarse. Estaba en quinto año (Lo que en Argentina es quinto año de secundaria, en otros países es segundo año de bachillerato o Preparatoria como le dicen en México) como ven, me falta poco para finalizar mis estudios.
Todos felices porque la mayoría pasó a sexto año y por eso también se festejaba. Yo pasé, exitosamente, con muy buenas clasificaciones tanto del último trimestre como del promedio final de cada materia, incluyendo Matemática. Sí, la materia que odio con todo mi ser. En las últimas semanas estaba nerviosa ya que se nos iba a tomar una evaluación integradora y como la matemática me desagrada, tiendo a olvidarme de todo, es decir, cosas que había visto el trimestre pasado ya no las recordaba. Lo bueno fue que la profesora me dio para que haga 4 de 7 consignas, las cuales les había dado a los chicos, así que zafé de hacer cosas como graficar funciones en el geoplano y esa complicada ecuación o al menos para mí, que nunca llegué a entender. La otra ventaja era que ella nos advirtió que aunque decía "evaluación", era como un trabajo práctico, así que podíamos consultar con ella si precisábamos ayuda. ¿Y yo? ¡La precisaba todo el tiempo!
Fuera de chiste, ella me estuvo ayudando porque yo no entendía mucho, aunque me hizo estas 4 consignas lo más fácil posible y la integradora te deja todo servido en bandeja ya que sólo dependes de la carpeta, de mucho no me servía, pues es la típica maldita materia que a todos se nos dificulta, salvo a quien le fascine, por supuesto.
Milagrosamente para mí, en esa evaluación saqué 9, el tercer y último trimestre cerré con 8, y el promedio de dicha materia es 7,66. Lucas, uno de mis compañeros, acotó a la salida de la escuela mientras caminaba junto a mi mamá: "Eran notas regaladas". Le doy la razón porque en parte siento que nos regaló a más de uno un punto, y más le valía a esa profesora el haberme aprovado, encima que odio esa materia, la profesora no terminaba de agradarme y no tenía ganas de verle la cara en diciembre. Me quité un gran peso de encima con esa materia, eso es seguro.
Las otras notas no las recuerdo bien a todas, pero coloco la de matemática ya que es una materia pesada y que nos altera, para los que son como yo, que no nos gusta.
Aquí les dejo una publicación especial de celebración que hice en mi Facebook, publicada este viernes 24 de diciembre, último día de clases para los que aprobaron y no tienen que ir al día de orientación de la materia que reprobaron o para cualquier otra cuestión de la misma.
A la salida, todos teníamos frascos de espuma o nieve que empezamos a rosiarnos entre nosotros, ¡A mí me bañaron! Lo malo fue que la espuma que compraron, era de colores y si te arrojaban en el pelo, éste se endurecería y tenías que lavártelo y fuera de ese detalle, te verías ridículo así de colorido. No se preocupen, yo arreglé ese inconveniente en mi cabeza.
E aquí lo que escribí en Facebook, dedicado también para mis compañeros de ese secundario.
Hoy me enorgullece comunicarles a mis amigos que fue mi último día de clases, ¡Y pasé de año! ¡Sexto año de secundaria! Para mis amigos del extranjero, les traduzco: Sexto año en Argentina es sinónimo de tercer año de preparatoria o bachillerato, dependiendo de cómo lo denominen en sus respectivos países.
Hoy fue un día especial para el curso de la escuela media 30 (Anexo) nuestro último día de clases y felices porque ya cerraron todas las notas. Y sí, afortunadamente, aprobé Matemática, así que por unos meses me libro de esa tortura y de la materia que tanto amo (Sarcásticamente). Obtuve muy buenas clasificaciones tanto del tercer y último trimestre como de los promedios.
Y en la salida, festejamos cantando y roseando espuma de colores a todos, entre todos nosotros. Y sí, estos desgraciados me bañaron en espuma y arruinaron mi pelo, pero luego me lavé y ahora estoy reluciente.
Compañeros y amigos del secundario: Por si están leyendo esto, quiero decirles que les agradezco por este hermoso año que me hicieron compartir junto a ustedes, y debido a que estaba en un nuevo grupo, a algunos los conocía y a otros recién los conocí este mismo año y la verdad es que son un muy buen grupo, me aceptaron tal como era (Eso creo...) gente con buena onda. Pese a nuestras peleas como ocurre en todo grupo social, nos queremos y nos apoyamos entre todos. Me enorgullece mi curso, me enorgullece las personas que me tocaron como compañeros y los quiero mucho a todos, aunque lo exprese poco por estar fuera de mi sona de confort, pero bueno.
Con emoticones y frases como "¡Viva nosotros!", lancé esa publicación que obtuvo más de 40 reacciones y 20 comentarios de personas que me felicitaron, bla bla bla, ¡Siempre las mismas palabras! ¿Qué se le va a hacer?
Y tarde pero seguro, ¡También festejo mis merecidas vacaciones en mi amado Blindworlds!