Texto publicado por Irene Azuaje

Hola chicos, escribo estas líneas para intentar drenar una frustración que no me deja en paz.
Hace unos días fui a la uni donde me gradué a ver si necesitaban profes de inglés, luego me llamaron para que llevara los papeles, eso hice la semana pasada y que nos veríamos hoy.
Hoy volví a ir, pero el que debía atenderme le salió una reunión a última hora (entiendo que los imprevistos existen) estuve esperando hora y media hasta que decidí irme a casa porque me desespera la falta de consideración con respecto al tiempo de los otros.
Y bueno, hasta ahora ni una llamada y lo que más me atormenta es que mañana es el funeral de una prima de mi mamá (muy querida para ella) y ella cree que sí me llamarían, pero no soy para nada optimista porque, simplemente no estaban tan interesados.
Me siento horrible, como si le hubiera arruinado el plan a mi mamá porque quería ir a despedir a su prima tan querida y ahora por esta mierda no va porque cree que me llamarán ¡no lo creo, maldita sea! me siento que soy una carga, odio esta dependencia.
jajajajjajajajjajajajajajjajajajajajajjajajajaj, maldita ceguera, ¡jamás te había aborrecido tanto! siento que siempre arruinaré los planes de la gente de mi entorno, ¡mil veces maldita ceguera! siempre seremos una carga, lo aceptemos o no.
Saludos llenos de rabia y altas dosis de impotencia.