Texto publicado por Leandro Benítez
Los obispos españoles advierten de que "no hay verdadero amor" cuando se utilizan métodos anticonceptivos
El portavoz y secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino, ha defendido que "no hay verdadero amor cuando hay anticoncepción" y que la mentalidad anticonceptiva convierte las relaciones "en tráfico de intereses, sobre todo fuera del matrimonio" pero también dentro del mismo.
"La apertura a la fecundidad de todo matrimonio implica que la anticoncepción es contradictoria con el verdadero amor", ha subrayado durante la presentación este miércoles del documento ’La verdad del amor humano. Orientaciones sobre el amor conyugal, la ideología de género y la legislación familiar’, en el que se toca indirectamente el tema de la anticoncepción.
En este sentido, ha subrayado que el uso de medios anticonceptivos, "mutila la relación interpersonal entre los esposos de su dimensión procreativa" y ha añadido que "un acto voluntario de mutilar implica no reconocerse mutuamente en su integridad de lo que es el cuerpo de la mujer y del varón, en su unión en una carne, que conlleva la fecundidad".
Además, ha afirmado que utilizar anticonceptivos tanto dentro como fuera del matrimonio, pero sobre todo fuera del matrimonio, es "inmoral" y "no porque lo diga la Iglesia sino porque es falsear la relación de amor".
Por otro lado, ha subrayado la importancia de la familia, cuya protección, según ha indicado, es "más importante que las finanzas" y que, según ha apuntado, es "maltratada" en Occidente. Por ello, ha instado a los poderes públicos a "tomar en serio a la familia como capital social fundamental" ya que, a su juicio, será uno de los elementos que ayude a salir de la crisis.
Además, ha señalado que llama la atención que en unas sociedades "ricas, sanas y sin guerras" la población disminuya. "Eso nunca había sucedido en la historia y es un síntoma importante de la crisis de valores y de la crisis de tratamiento adecuado de las familias", ha añadido.
Por ello, ha apuntado que esperan, tanto del Gobierno actual como de cualquiera otros gobernantes, que impulsen "una política familiar más justa" y les ha animado a "romper clichés basados en el individualismo y en concepciones trasnochadas de la libertad" que, a su juicio, "causan un daño social tremendo". No obstante, ha indicado que es "difícil" decir si ven con capacidad o no a los gobernantes para lograrlo, pero ha señalado que confían en que sí lo sean.