Texto publicado por Ale. c

El reencuentro

Martín estaba apunto de subir a su auto después de salir del Gimnasio, Hombre atlético de unos 35 años, con actitud ganadora y mirada sobradora. Cuando se encaminaba hacia su vehículo su camino fue interrumpido por un increíble cuerpo femenino, era una hermosa mujer, con un cabello largo negro ondulado, con una piel bronceada, labios gruesos, pechos firmes y cintura estrecha.
Sus miradas se cruzaron, Martín quiso abordar rápidamente la situación y encararla. Pero él se iba a sorprender cuando ella menciono su nombre, lo conocía.
Martín te acuerdas de mí, Marina Suárez, tu compañera del colegio
Si Marina tanto tiempo, dándole un abrazo, aunque en el fondo realmente no se acordaba de ella. ¿Y que fue de tu vida? Preguntó sin importarle la respuesta que ella diera, ya que su única intención era llevar a la cama a esa bella mujer.
Si te contara todas las cosas que hice durante estos años, estuve de viaje, conoci un montón de lugares, pero bueno no quiero quitarte tu tiempo me imagino que debes estar muy ocupado.
La verdad que si ando ocupado pero siempre tengo tiempo de invitarle un café a una antigua compañera de escuela
¿Seguro que podes? mira si queres lo dejamos para otro día
Si, por algo nos encontramos hoy, mira acá esta mí auto y conozco un buen lugar acá cerca..
Bueno entonces vamos.
Subieron al auto, fueron a un café un poco tradicional pero a Martín le interesaba ese lugar ya que estaba cerca del departamento donde solía llevar a las chicas que conocía.
Estuvieron hablando un buen rato, ella le conto de sus viajes pero a él poco le interesaba, tampoco le interesaba acordarse quien era. Solo quería tener la oportunidad de revolcarse con ella en su departamento.
En un momento ella le confesó que él siempre le gustó en el colegio, pero que él nunca se percato de su presencia, entonces el rápidamente dijo siempre hay tiempo de remediar errores del pasado.
Entonces ella con voz seductora, pregunto ¿Como lo pensas remediar?
Él sugirió ir a su departamento que quedaba ahí cerca. Ella aceptó y se fueron los dos.
Al llegar al departamento, comenzaron a besarse salvajemente mientras se desprendían de sus ropas,. Fueron casi dos horas de sexo intenso.
Luego de haber terminado, se quedaron los dos en la cama, recordando los momentos que pasaron en la escuela.
Te acuerdas de Rubén, el petiso el que siempre andaba conmigo, no puede ser que no te acuerdes.
No me acuerdo. Dijo ella mientras se bajaba de la cama desnuda para tomar su bolso.
Sabes porque no me acuerdo, porque nunca fui al colegio con vos, mientras sacaba de su bolso un arma con silenciador haciendo dos disparos certeros que impactaron el cuerpo de Martín dándole muerte al instante.
Luego se sentó en la cama dándole la espalda al ya cadáver de Martín. volvió a meter la mano en su bolso para sacar su teléfono y realizó una llamada. Diciendo estas palabras:
Ya esta hecho, su marido no la va a engañar más…