Texto publicado por Urria Gorria
la sabiduria de la vejez (chiste)
Caminaba un viejito por el bosque cuando escuchó una débil voz a sus pies.Se agachó y descubrió que quien le hablaba era una ranita:-
"Soy una princesa hermosa, erótica y sensual, diestra en todos los placeres de la carne y el amor.La reina mala, envidiosa de mis encantos, me convirtió en rana, pero sí me das un beso volveré a ser bella.Entonces te daré todos los goces y deleites que mi voluptuoso temperamento puede producir."
Sin decir nada, el viejito levanta la rana, se la echa al bolsillo y sigue su camino....Desconcertada, la ranita asoma la cabeza y le pregunta:
-"¿Qué?, ¿No me vas a besar??"-"¡Por supuesto que no!", respondió el anciano...
-"A mi edad es mucho más divertido tener una rana que habla, que una pinche vieja loca, maniática sexual."