Texto publicado por Toten Dos punto Cero

Toten publicaciones presenta:

TOTEN Y EL CASTIGO DIVINO DE LAS GALAXIAS EXPLOSIVAS ESTELARES DEL INFIERNO DE LOS PITUFOS MALDITOS

6ª edición – Amigos Serán Los Amigos

Holaaaaaa!!!!!!!!

Hoy les toca a los amigos, un agradecimiento de corazón a todos ellos. Este artículo lo separo en dos partes, ya entenderán por qué, aquí va la primera, con la siguiente consigna:
- leerlo pensando en ese mejor amigo, amiga, compañero, compañera, persona especial, a la que uno siente que le debe tanto, y que siente orgullo de conocer y compartir momentos y sentimientos…

Vos, sos de las cosas más grosas que me pasaron en la vida, de lo más hermoso, sonrío al recordar todas aquellas anécdotas que compartimos, esas carcajadas que nos dejaban con disfonía, esas miradas que sólo nosotros sabemos lo que significan, sinceramente agradezco haberte conocido. Me salvaste de un montón de bajones, me animaste a hacer cosas que jamás imaginé que haría, me escuchaste decir las mismas boludeses miles y miles de veces, me regalaste recuerdos eternos para mi memoria.
Siempre supiste comprenderme, entender mis pelotudeses, defenderme de lo que podría hacerme mal, mancarte mis berrinches. No olvidaré tus chistes, tu risa, tus gestos de complicidad, tu preocupación ante mis problemas. Feliz me siento de poder contar con vos, de tenerte al otro lado del teléfono cuando estamos lejos, de tu oreja incondicional, de tu mano ante la adversidad.
Se que mi lista puede seguir, pero a estas alturas las palabras están sobrando ya, gracias, de todo corazón, con toda mi alma, con mi mejor sonrisa, con mis brazos abiertos, gracias, gracias.

Ahora viene la segunda parte del texto, la cual tiene la siguiente consigna:
- leerlo como si esa persona especial, amigo, amiga, compañero, compañera, hermano, hermana, quien sea la más importante de nuestras vidas, nos lo estuviese diciendo a nosotros, con la mirada firme y serena…

Vos, sos de las cosas más grosas que me pasaron en la vida, de lo más hermoso, sonrío al recordar todas aquellas anécdotas que compartimos, esas carcajadas que nos dejaban con disfonía, esas miradas que sólo nosotros sabemos lo que significan, sinceramente agradezco haberte conocido. Me salvaste de un montón de bajones, me animaste a hacer cosas que jamás imaginé que haría, me escuchaste decir las mismas boludeses miles y miles de veces, me regalaste recuerdos eternos para mi memoria.
Siempre supiste comprenderme, entender mis pelotudeses, defenderme de lo que podría hacerme mal, mancarte mis berrinches. No olvidaré tus chistes, tu risa, tus gestos de complicidad, tu preocupación ante mis problemas. Feliz me siento de poder contar con vos, de tenerte al otro lado del teléfono cuando estamos lejos, de tu oreja incondicional, de tu mano ante la adversidad.
Se que mi lista puede seguir, pero a estas alturas las palabras están sobrando ya, gracias, de todo corazón, con toda mi alma, con mi mejor sonrisa, con mis brazos abiertos, gracias, gracias.