Texto publicado por Toten Dos punto Cero

30ª edición - Cambiame la música

Toten publicaciones presenta:

TOTEN Y EL CASTIGO DIVINO DE LAS GALAXIAS EXPLOSIVAS ESTELARES DEL INFIERNO DE LOS PITUFOS MALDITOS

30ª edición – Cambiame la música

Holaaaaaa!!!!!!!!

Ahora, y desde hace rato, es facilísimo meter 100 canciones en un CD gracias al método “mp3”. Es cómodo, práctico, económico, y es terriblemente atentativo contra los grupos y solistas musicales, discográficas (que poco me importan), y lo peor de todo atentamos contra nosotros mismos, ya que dejamos de apreciar lo que es un verdadero “álbum” o “LP”.
A estas alturas nada debe sorprendernos, somos cada día mas simplistas, mas cómodos, menos detallistas, y nos estamos convirtiendo en una especie que espera que nos den todo servido. Lo hacemos con los servicios de delívery, compras por Internet, controles remotos, microondas, lavaplatos, etc…y entre otras cosas, lo hacemos con la música. Repito, es muy práctico tener la discografía de Miranda en un solo CD (el tema es para que mierda uno quiere eso), pero no nos damos cuenta que de este modo, dejamos de “degustar” cada canción o disco que escuchamos como realmente se debería hacer; es como la tabla que para mi gusto es bien acertada: “mientras más elementos tengo, menos valor le doy a cada parte” y por lo tanto, nos damos cuenta que queremos que Lolo, se meta la guitarra bien en el orto. Algo que suele suceder es que tenemos la tendencia de querer abarcar todo, queremos y /o necesitamos acapararlo todo y por lo tanto, en este caso puntual, queremos escuchar todas las canciones a la vez, y es así como vamos pasando de tema sin siquiera llegar a un estribillo o coro. Sería muy distinto si uno tuviera sólo un álbum de los Pimpinela, en ese caso ni te gastas en escucharlo, pero si tuviésemos un disco de por ejemplo, Soda Stereo, lo escucharíamos entero; prestaríamos mas atención a cada track que si poseyéramos la discografía completa en un único Cd. A todo esto, le voy a sumar que la calidad de sonido de cada canción se deteriora con la compresión que recibe al convertirse de archivo de audio a archivo mp3, y que si uno, lo tiene en este formato, se pierde de tener el librito con fotos y letras y demases, que muchas veces le dan un toque especial al disco en cuestión.
Es obvio que la diferencia de precio es abismal, un Cd de audio cuesta 40 pesos de promedio, y en un CD grabable en mp3 entran aproximadamente 10 álbumes costando un precio estimable de 2,50, o sea, si quisiéramos la discografía de los Backstreet Boys en discos originales nos costaría (en el caso que sean 10 LP) un total de 400 mangos, y si lo tenemos en mp3, equivale al precio que mencioné recientemente. Quiza se pueda llegar a un equilibrio, bajando precios de discos originales, o uno mismo grabándose de a un disco por CD, eso va a ir en cada uno, depende como desée apreciar lo que escucha, y agradezco enormemente que no me gusten comprar los discos originales, ni me gusta la Mona Jiménez….
Aaaahhhhh…y Silvita, ni en mp3 te pienso escuchar!!!!!!!!!!!!!!!!!

¡¡¡chauuuu!!!