Enlace publicado por Gory

Día Internacional del libro. ¡Quien lee vive mas!

Continuamos con la tónica del año pasado y así celebrar el Día del Libro.
En el enlace puedes entrar a la publi del año anterior (para no repetirnos) y en esta seguir reseñando títulos de libros que te marcaran por alguna razón o simplemente por el placer de leer.
Este año recordaré el último libro que leí en tinta,su olor a papel, elsonido de las hojas, lailustración de la portada y la textura delpequeño volumen...
Fue en Julio del año 1995 ,unos días antes de emprender mi viaje a Ecuador, entonces no podía sospechar que sería la última vez que me entrarían las letras por los ojos y que la siguiente vez deberían deslizarse ya por los dedos...
En 1994aparecía el libro de Susana Tamaro "Donde el corazón te lleve",un librito intimista y exquisito cuya recomendación correría como la pólvora, de boca a oreja...
Leeremos: "Lo que no supimos decir nos dolerá eternamente y sólo el valor de un corazón abierto podrá liberarnos de esta congoja. Nuestros encuentros en la vida son un momento fugaz que debemos aprovechar con la verdad de la palabra y la sutileza de los sentimientos."
Sinopsis:
Viendo inminente el final de su vida, Olga decide escribir a su nieta una larga carta para dejar constancia de lo que ninguna de las dos ha sabido ni decir ni escuchar. Cuando la nieta regrese, sólo encontrará la relación de los pensamientos, sentimientos, delicadeza y esperanza, soledad y amargura que la vida ha ido tejiendo. Por la carta, se sabrá cuál fue la historia de la familia, las peleas con la hija muerta, los desencuentros y las heridas que nunca cicatrizaron.
Con esta obra intimista y epistolar, Susanna Tamaro conquistó a trece millones de lectores en todo el mundo. Con gran sensibilidad revela la riqueza de los sentimientos que permanecen ocultos. Diálogo que enseña a conocer mejor la naturaleza de nuestras relaciones, Donde el corazón te lleve es una obra narrativa exquisita: dulce remembranza de una voz que se deja llevar por los tímidos dictados delcorazón.
Aún conservo en mi casa este librito...