Texto publicado por Brenda Stéfani
El pase
él, que no aprovechó etapas, el que nunca hizo nada malo, crece sin saber para donde ir, sin tener la idea de que algún día tendrá que pelear para sobrevivir.
los días pasaron tras de si, dándose cuenta de que faltaban vivencias, faltaba el toque del dolor que aparece a medida que el tiempo y su edad vayan transcurriendo.
solo buscaba un escape de algo incierto que sabía más que nadie quetendría que pasar, que sin falta llegará y talvez transgreda sus ideas de sí mismo cambiando repentinamente su mundo y sobre todo, las cosas que prottegía en sucorazón.
en su vida esquivó cualquier problema que lo iciera sufrir, lo que le hiciera sentir mal, los tropiezos de su adolescencia y todabía seguía creyendo que lo que estaba haciendo era lo correcto.
evitaba el revelarse,no encaraba de frente y con tal de quedar bien con sus mayores a todo decía que si, no contradecía a nada a pesar de que muchas veces pensaba todo lo contrario.
y hoy se ve enredado.
vive atrapado en un encierro donde juega a dos puntas, busca superarse pero a la vez retrocede, el miedo se alimenta de su cuerpo y de su alma, de el deseo de romper las cadenas, el olvido de su esencia por la apariencia, deja inservible cualquier emoción.
el clamor impulsivo de sus confusiones vibra y sueña con estrellas.
con volver a crearse no alcanza.
se arranca las penas llenando el vaciío con ruído exterior, con palabras sin mensages, con historias inventadas.
hablar y hablar, solo hablar para no escuchar su propia voz, su pensamiento, su ser.
tapaba los agujeros de su existencia una vez, otra vez, y otra vez.
corría incansablemente de sus fantasmas que eran las mismas voces que repiten, repiten y repiten una historia inconclusa, esos desafíos que por no sufrir estalló.
Este es el bolcán de mi alma, el número de veces que perdí, buscándo ser la perfección imperfecta, la persona humana ideal.
fui juntando mis luchas, dejándolas en el olvido, hice de mí un ser indeciso y cada vez más limitado, más alejado de la realidad.
aceptarla es lo que le cuesta, definirse es su perdición.
no puede entenderse y quiere entender los sucesos que ocurren en su alrededor.
Este es el pase, el pase de ser niño a adulto,
es el tiempo en que gira el mundo, su mundo que debe calmar.