Texto publicado por María Auxiliadora Rojas Morínigo
Mis más sinceros sentimientos, en su máxima expresión, para mi gran familia BW y para mi amor! :)
¡Buenas tardes, fantástica familia BW! Bien, hace tiempo que no aparezco con publicaciones porque realmente no encuentro algo que pueda interesarles, pero bueno, vengo porque siento que necesito aparecer más por la red, y que vayan conociéndome de a poco, aunque tengo publicaciones que quiero hacer, pero en fechas futuras.
Lo que quería destacar es que...la vida es maravillosa desde que comienza; a ver, recordemos cuando éramos niños...todo lo que hacíamos, los momentos que vivimos, las personas con quienes crecimos, jugamos, nos reímos...en fin, todo ese pasar de la niñez, que luego, transcurrido el tiempo, va cambiando...bien, luego entramos en la adolescencia...esa etapa un poquito más complicada, donde todo empieza a cambiar, donde nos generamos muchas preguntas en la cabeza, que a veces tienen respuesta, y otras no, tenemos que ir encontrándola nosotros mismos...a ver, luego...se viene la siguiente etapa...pasar de ser adolescente a adulto...ya después de responder a todas las interrogantes que surgieron en nuestra cabeza a lo largo de los años, pero ahora, en vez de preguntas, se vienen responsabilidades a nuestras vidas! Y si, se vuelve todo más pesado, estamos demasiado cargados con trabajo, actividades de todo tipo, y muchas cosas más, olvidando esa vida de niño que teníamos antes, ligera, sin preocupaciones, sin tener que estar pendiente de muchas responsabilidades, y muchas veces, por ocuparnos demasiado en nuestras cosas, nos vemos desesperados, y sentimos que todo parece estar en contra nuestra, o que todo se nos viene encima y no lo podemos controlar...pero...es ahí donde volvemos a recordar nuestra vida de niños, donde nos protegían, nos cuidaban, nos daban amor, y afecto...y como lo hacemos? Cuando aparecen personas maravillosas en nuestras vidas que nos hacen sentir que si bien todo puede parecer oscuro, hay siempre una luz que puede iluminar nuestra mente para que podamos volver a ver la salida y seguir adelante en este gran camino que debemos recorrer, llamado vida.
Y a esto quiero llegar, a las personas que nos hacen sentir eso, que nos hacen ver que no todo es malo, que la vida puede seguir siendo demasiado maravillosa, llena de fantasías, sueños e ilusiones, aunque ya no seamos niños. Por esas personas vale la pena luchar, vale la pena seguir intentando, ¡vale la pena vivir! En mi caso, a mi corta edad (21 años) ya me he sentido vacía, sola, sin ningún objetivo aparente en la vida, sin sueños, sin ilusiones (o con ilusiones, pero frustradas). He sentido que ya nada valía la pena pero...siii, como ángeles caídos del cielo aparecieron esas personas que me maravillaron con tan solo su presencia, por el hecho de saber que están ahí han logrado cambios positivos en mi vida que jamás esperé, sobretodo una, mejor dicho uno...y se los presento: Se llama Víctor José Diana Quintana, la persona que me hizo conocer el amor en toda su dimensión, la persona que me da todo sin pedirme nada, quien me hace sentir que la vida es bonita, y que vale mucho, hasta me hace sentir que yo valgo mucho. Así que, todo este mini recorrido que hago por la vida, al final va inspirado en recordarlo a él, la persona más especial, el ser más grande y maravilloso que me tocó conocer, y a quien amo tanto. Y también para ustedes, ¡mi grandiosa familia bw! que son un mundo aparte como siempre lo dije, pero créanme, ¡son el mundo ideal en el que todos quisiéramos vivir! Y es un privilegio y un placer para mi formar parte de este mundo genial, y agradezco por la oportunidad que me dan de expresar mis sentimientos, y quiero que sepan que si bien no me hago ver mucho por acá, siempre doy paseos silenciosos por la red, maravillada por todo lo que publican, y sobre todo, los tengo siempre en mi corazón. Así que mi gente, para mi amorsote que también está acá, aunque no se lo vea mucho, y para todos ustedes, mis más sinceros agradecimientos por estar ahí incondicionalmente, sobre todo a quienes ya son más que amigos, son hermanos que tuve la oportunidad de elegir, no los menciono porque ya saben muy bien quienes son.
Sin más me despido, esperando que mi divague (palabras sueltas que demuestran mis más puros y sinceros sentimientos) sea del agrado de todos y de cada uno de ustedes, y esperando poder seguir apareciendo en la red, porque también quiero formar parte, no solo de su lista de amigos, sino también de su corazón, y sé que lo lograré! Abrazo!!! Se los ama mucho :)