Texto publicado por Rody Armando Mora

Un nobio fuera de sí

>  Un chico queda con su novia para cenar en casa de ésta y conocer a sus
> padres. Como el colega es muy nervioso se lo comenta a un amigo para que
> éste le ayude en tan apurada situación:

>  - Joder, hoy voy a conocer a los padres de Ana y estoy con una ansiedad
> tremenda.

>  - No te preocupes que tengo unas pastillitas que te pueden ayudar. Son
> tres. Te tomas una ahora, otra antes de salir de casa y otra durante la
> cena, y te sentirás dominador de la situación.

>  El menda se va a casa y antes de salir echa mano de las pastillas y se da
> cuenta de que la primera se la tenía que haber tomado hacía un rato. Le
> tocaba la segunda; entonces, por si la de la cena se le olvidaba decide
tomarse las tres de golpe en ese momento.

>  Llega a casa de la novia, las presentaciones de turno:

>  - Mi padre, mi madre, mi hermana, mi abuela...etc.

El caso es que el gachó empieza a sentirse muy acalorado y sudoroso.

- ¿Qué te pasa, Javi?

- No sé, mi vida, que tengo unos calores irrefrenables, y necesito hacer
> el amor contigo ahora mismo.

Agarra a la novia por banda y ante la mirada estupefacta de la familia,
> la
> tumba encima de la mesa y se la tira de forma bestial.

- ¿Pero qué me pasa?, es que no puedo controlar ésto... (dice el tío)

Cuando termina con la novia el chico sigue con la mirada perdida y los
> demás flipando y sin poder dar crédito a lo que estaban viendo. Mira a la
> hermana que estaba buenísima, la agarra por banda también y procede de la
> misma forma.

- ¿Qué me pasa, Diossssss?, ¿Qué me pasa?

Termina con la hermana y coge a la madre, le quita la ropa de mala manera
y se la tira también. El padre ya indignado hace amago de explotar pero en
> ese momento dice el jóven:

- ¡¡¡ Esto no puedo paraaaaaarlo !!!, ¡¡¡ ahora le toca a usted también
> !!!

Y antes de que el padre pudiese huir lo agarra del cuello, le hace
> agacharse, le baja los pantalones y lo empala como a un pincho moruno; la
> abuela aprovecha para salir corriendo y esconderse en un armario en la
> cocina. Mientras se monta al padre el tío desesperado coge el teléfono y
> llama al amigo.

- ¡¡¡ Cabronazo !!!, ¿qué coño me has dado?, ¡¡¡ mira lo que está pasando
> !!!.

- ¡¡¡ Gilipollas !!!, no debiste tomarte las tres pastillas de golpe;
> esos
> son sus efectos secundarios. Haz una cosa. Deja a ese hombre, vete a la
> cocina, abre la nevera, coge un cartón de leche y mete la polla dentro,
> eso
> te calmará.

El muchacho hace lo que el amigo le dice y cuando mete la minga en el
> cartón de leche le entra una sensación de alivio y placer, que al verlo la
> abuela desde su escondite sale como una posesa hacia el salón diciendo a
> gritos:

¡¡¡ A ESCONDERSE, TODOS QUE LA ESTÁ RECARGANDO !!!