Texto publicado por Toten Dos punto Cero
breve reseña de Sinesthesia, el grupo musical que fundé en el año 2000, y que fundiré en cualquier momento.
Hola valiente lector.
como este sábado 27 de julio haremos un nuevo show para que sigan sangrando los oídos de los pobres asistentes, en plena Capital Federal en Argentina, decidí arruinarles el día contándoles un poquito de mi banda.
corría el año 2000, y tuve la pésima idea de formar un grupo musical, y si con eso no bastara, para terror de la gente, decidí ser el cantante y bajista.
Primero hacíamos punk rock (pank rock), y no les cuento de que hablaban las letras, porque me echarían bien justificadamente de Blindworlds. Si digo que éramos un desastre, es porque estoy siendo generoso.
Cuando íbamos a hacer el primer show, nos dijeron: "Muchachos, se suspendió el festival pank porque la gente rompió todo el local ayer, así que sólo se hará heavy metal (jevi métal)".
Yo, Toten, para seguir con el hilo de mis desgraciadas ideas, opté por cambiar el estilo de pank a jevi métal. si antes gritaba por el micrófono, en ese entonces aullaba de espanto a través del mismo. Pero algo raro ocurrió, algo sinceramente icreíble nos sorprendió al terminar nuestra primera presentación: No sólo la gente sobrevivió al ruido, sino que además, le gustó.
era obvio que la gente era sorda o le fallaba un poquito la psiquis.
por ddos años hicimos shows, y sin dejar gente mal herida en apariencia.
El 2003 disfrutó sus cuatro estaciones sin las canciones de Sinesthesia, aunque el 2004, no corrió con la misma suerte.
hicimos dos shows muy divertidos (para nosotros) durante ese año, y ahí dejamos de tocar hasta este año.
la frase que creo nos identifica mas es: "No hay peor encierro que el de úno mismo."
tristemente, tantos años sin tocar, me dieron ganas de romper más oídos ajenos, lástima Silvita nunca vino a los shows, pero así mismo, me voy dando cuenta que usé muchas comas, y ahora pondré un punto seguido para continuar. Yo a veces lo lamento por la ingenua gente que viene a nuestros shows por primera vez, y queda aterrada por tan estrambótica experiencia, pero no puedo dejar de admitir, que me encanta subir a un pequeño escenario frente a 30 indefensos, colgarme el bajo eléctrico, y cantar hasta que los pulmones y garganta me reclaman piedad y un fernét con coca.
este será el segundo show del 2013, y quienes quieran, si lo desean, vayan pidiendo...¡que nó haya más por faaahaavooohohor!