Texto publicado por Fátima Osores
A ESTE VIEJO POEMA LE FALTAN DOS VERSOS PARA SER SONETO; QUÉ PENA
QUÉ PENA
Qué pena que me duela tu nombre todavía
y no poder sacarte de esta cabeza loca.
Qué pena haber soñado tus manos y tu boca;
qué pena que hayas sido mi mayor fantasía.
Qué pena aquel tangible sueño de la empatía
y la verdad terrible de la gran diferencia.
Estrella titilante probando mi paciencia,
al borde de los dedos yo sé que te tenía.
No sabes sin quererlo lo mucho que me diste
y yo, queriendo tanto, no pude darte nada.
Pero mi fantasía mayor se queda trunca,
Porque no me quisiste, ni hoy ni ayer ni nunca.
Fátima Osores