Texto publicado por Primavera

Una conversación por el camino de la escuela a casa.

En este año, mi hijo va a cumplir diez años. Esta conversación tuvo lugar el verano anterior, cuando tenía solo nueve.
Imagínense un día caluroso de verano, un lindo parque con grandes árboles. Son las tres y media de la tarde. Como siempre, a esa hora en un día hábil, en el parque está solo la gente mayor con perros y los estudiantes de los primeros cursos. Nosotros venimos de la escuela en bicicleta habitualmente.
Delante, bajo el enorme castaño, noté a una pareja besándose.
• Hijo mío, vamos a dar una vuelta para no molestarlos.
• - Mamá, no te preocupes por favor, puedo verlo. Ya sé que eso es el sexo.
• - joo. ¿¿Qué sabes del sexo?
• - Que incluso puedo contarte todo en orden.
• ¡- Cuéntame por favor!
• - pues, oye; al principio una chica y un chico se encuentran, después se hacen amigos. Luego ellos van al restaurante y allí hablan. Posteriormente el chico invita a la chica a casa. Y ALLÍ TIENEN SEXO.
• - ¿y tú sabes como lo hacen?
• - Claro que sí, mamá.
• Yo voy un poco delante y no veo su cara y él no ve la mía. Creo que en ese momento ella cambió mucho. Mientras tanto, mi hijo sigue contando con un tono sereno:
• - Ellos se quitan la ropa, se besan, y después toda la noche duermen juntos. Luego en la habitación entran los padres de la chica y el chico le dice a su padre: “Nosotros nos amamos, por eso hacemos el amor, y además quiero casarme con su hija. ¿No le importa? El padre dice que no le importa y lo llama por su nombre. Luego el chico lo llama por el suyo. Ellos se conocen, se dan las manos. Pues, esto es todo.
• - ¿cómo es todo? Pregunto yo con el tono desilusionado. ¿Y qué pasa después?
• - Se casan y la mujer da a luz a los niños. Al principio nace una hija y después nace un hijo.
• - ¡Y de dónde aparecen los niños ¿tú sabes también?¿
• - Claro que sí, - declara mi chico presuntuosamente.
• – Ya te he dicho que sé todo de esto, mamá. – Cuando tenían sexo, en la tripa de la chica apareció la sustancia que luego se convirtió en un niño. Para dentro de unos meses, ella empezar a dar a luz.
Es mejor que la chica respire tranquilamente. Entonces todos le dicen ...
y, de repente grita...
• - ¡empuja!
• Como no lo esperaba, freno bruscamente.
Mi hijo me alcanza y pregunta con confianza
• ¿Mamá, ¿y qué significa empuja?