Texto publicado por Miguel de Portugalete
Pruebas prometedoras de un páncreas biónico.
Pruebas prometedoras de un páncreas biónico.
Bioingeniería.
Ciencia: Pruebas prometedoras de un páncreas biónico.
Se ha probado con éxito la más reciente versión de un dispositivo médico definido como páncreas biónico en dos ensayos clínicos de cinco días de duración,
uno en adultos y el otro en adolescentes, los cuales impusieron mínimas restricciones a las actividades cotidianas de los pacientes. El dispositivo controla
el azúcar en sangre en pacientes con diabetes de tipo 1, usando dosis tanto de insulina como de la hormona glucagón, que eleva el azúcar en sangre.
El equipo que ha realizado los ensayos, integrado por especialistas de la Universidad de Boston y el Hospital General de Massachusetts, ambas entidades
en Estados Unidos, ha visto superadas ampliamente sus expectativas sobre la eficiencia de este dispositivo, en cuanto a su habilidad de regular la glucosa,
prevenir la hipoglucemia y adaptarse automáticamente a las cambiantes necesidades, minuto a minuto, de cada persona, así como a la notable diferencia en
el perfil de requerimientos que existe entre un adulto y un adolescente. El crecimiento rápido y los cambios hormonales de la adolescencia producen requerimientos
de insulina que son de dos a tres veces más grandes que los de los adultos con el mismo peso corporal. E incluso, aunque las dosis necesarias en adultos
son más predecibles, contraer una enfermedad típica como pueda ser un resfriado, o padecer de problemas gástricos, pueden cambiar de forma drástica la
necesidad de insulina a lo largo de un período de días o semanas.
"Actualmente no hay una terapia de cuidado estándar que pueda alcanzar los resultados que hemos visto", ha declarado sobre el dispositivo Edward Damiano,
del Departamento de Ingeniería Biomédica en la Universidad de Boston, uno de los investigadores principales del proyecto. Damiano conoce bien lo que significa
vivir con diabetes, ya que su hijo de 15 años fue diagnosticado con una de tipo 1 a la edad de 11 meses.
Una de las virtudes claves de este dispositivo, diseñado por Damiano y Firas El-Khatib, de la misma universidad, es su capacidad para empezar a controlar
el azúcar en sangre de forma instantánea, basándose sólo en el peso del paciente, y de adaptar continuamente su toma de decisiones en relación con las
dosis de insulina y glucagón, para manejar un amplio abanico de necesidades de aplicación.
El páncreas biónico consiste, en sus primeras versiones iniciales de prueba, de un smartphone, mostrado arriba, conectado a un dispositivo que mide automáticamente
los niveles de glucosa, y dos bombas, mostradas abajo, que suministran las dosis de insulina o glucagón, cada cinco minutos. (Foto: Departamento de Ingeniería
Biomédica de la Universidad de Boston)
El equipo de Damiano, El-Khatib y el Dr. Steven Russell, de la Unidad de Diabetes en el Hospital General de Massachusetts, ya probó con éxito en ensayos
clínicos una versión más primitiva del dispositivo varios años atrás.
Junto con las mejoras en el software que permite al dispositivo adaptarse a una amplia gama de necesidades individuales de aplicación de dosis, la nueva
versión también se apoya en un hardware mejorado, incluyendo un teléfono inteligente (iPhone 4S) capaz de comunicarse inalámbricamente de forma práctica
con dos bombas que proporcionan las dosis de insulina y glucagón. Cada cinco minutos, el teléfono inteligente o smartphone recibe una lectura del azúcar
en sangre desde un sensor continuo de glucosa, que se emplea para calcular y administrar una dosis de insulina o de glucagón.