Texto publicado por TifloFernando
Tendinitis de Aquiles...en el deportista
Muy buenas amigos y amigas lectores y lectoras habituales de mis Publicaciones en BlindWorlds:
Me voy a permitir compartir con todos vosotros, una Publicación (Post) extraída de un Blog que me parece muy interesante para los amantes del Deporte, o bien curiosos de los Temas relacionados con la Actividad Deportiva:
Revista GO&RUN...Publicación On Line, de periodicidad mensual y con Temas que van desde la práctica de un Deporte concreto,
a Diversas Patologías derivadas o relacionadas con el Deporte, y Temas variados como Nutrición, Psicología del Deporte, Tips (Trucos) diversos, Fisioterapia, etc.
En esta ocasión, nos ofrece una Patología muy frecuente en el Atleta de cualquier disciplina en la que el correr o el saltar, se presenta con gran frecuencia:
"Tendinitis de Aquiles"
De entrada me gustaría que quedara muy claro el Concepto:
Entiéndase como "tendinitis" de Aquiles; una inflamación e irritación en el tendón de Aquiles; El punto débil del CORREDOR.
Es decir el tendón que tenemos en la cara posterior de la pierna, que desciende desde los gemelos al talón; Es básico su conocimiento para los atletas y para los médicos que les tratan, para poder prevenir y tratar esta lesión tan frecuente.
En la Historia de la Literatura Universal; En tiempos de la Ilíada de Homero el nombre del gran guerrero y héroe AQUILES estuvo unido al Tendón del tríceps sural (Los dos músculos gemelos y el músculo Soleo) Tendón de Aquiles.
Thetis, su madre, le hizo invulnerable sujetando al niño por el tobillo y sumergiéndolo en el río Styx, tras conocer la profecía de que su hijo Aquiles moriría en batalla, pero al no sumergir la zona del talón de uno de sus pies, en el agua, hizo que éste fuera su punto vulnerable.
Aquiles conquistó Troya con sus fuerzas militares Griegas, y mató al príncipe de los Troyanos Héctor, Sin embargo, el hermano de éste Paris mató a Aquiles hiriéndole con una flecha envenenada en su punto vulnerable: el talón. El conocimiento de la anatomía especial de este tendón, fue crucial para el éxito obtenido por sus enemigos.
Y el resto de la Historia narrada en este Libro, si se desea...Pues lo mejor es leerlo, completo o en un resúmen, de los que circulan por la Red de Redes.
Es evidente que si deseamos prevenir lesiones de este importante tendón, además de la terapia propia, el método esencial consiste en suprimir la causa o factor desencadenante.
A veces el dolor se va como ha llegado. Pero es necesario tomar todas las precauciones necesarias, sin olvidar el estirar antes y después de cada entreno y la hidratación. Correr sobre terreno suave, no hacer bajadas con fuertes pendientes, zapatillas adaptadas con suelas no muy flexibles...
Y el resto lo dejo en mi Publicación que deseo les guste y animo a revisar la Revista mencionada, disponible en la Web citada.
Con gran cariño, TifloFernando.
=
Revista GO&RUN
(http://www.revista-goandrun.com)
revista electrónica para la comunidad atlética
Revista GoAndRun, Número 82; Marzo de 2015
Tendinitis de Aquiles
Medicina Del Deporte
01 de Marzo de 2015
La tendinitis de Aquiles en una inflamación e irritación en el tendón de Aquiles. Un tendón es un cordón de tejido muy resistente que conecta los músculos con los huesos. El tendón de Aquiles conecta el músculo de la pantorrilla con el talón. Una lesión en el tendón puede inflamarlo o romperlo por completo. Es la inflamación del tendón en cualquier punto de su recorrido
Aproximadamente el 11% de todas las lesiones producidas por la carrera son la inflamación del tendón de Aquiles. Un corredor que corre una distancia de 5 kilómetros golpea el suelo con el talón un promedio de 3000 veces. Con semejante tensión ejercita sobre la musculatura posterior y el tendón de Aquiles, no nos extraña que pueda producirse una lesión.
Su principal función es la flexión plantar. Este tendón como la mayoría de los tendones, tiene un ritmo metabólico muy bajo, muy poco riego sanguíneo, lo que implica retraso en la curación y un prolongado periodo de rehabilitación.
TENDON DE AQUILES
Hay tres músculos grandes en la pantorrilla: sóleo, gemelo interno y externo que constituyen el llamado tríceps sural. Corre por el dorso de la pierna. Que generan la fuerza para empujar el pie o pararse de puntas, y están conectados al talón por el gran tendón de Aquiles que se inserta en la tuberosidad posterior del calcáneo. Dichos músculos son importantes para caminar. También participa en la flexión de la rodilla.
Es un tendón muy potente que soporta en carrera fuerzas de hasta 500 kgrs. Y puede, por tanto, ser asiento de diversas lesiones en cuanto se modifican las condiciones de contracción, el eje de tracción o sufre traumatismos por compresión directa en pleno funcionamiento.
CAUSAS
Correr en superficies duras.
Entrenamientos inadecuados. Aumento de la cantidad o intensidad del entrenamiento deportivo
Falta de tiempo o paciencia cuando aparecen los primeros síntomas para abordar el problema en su comienzo y no cuando el daño es avanzado y difícil de solucionar.
Lesión por sobre uso. Uso excesivo del tendón de Aquiles
Cambios en la altura del tacón. Si en la vida normal se calzan zapatos de tacón alto y en la práctica deportiva se eliminan, el tendón sufre una tracción desacostumbrada en condiciones de esfuerzo, provocando su irritación.
Compensación de un arco plantar doloroso. El deportista fuerza la tracción del Aquiles al modificar el apoyo plantar para evitar el dolor del arco.
Las desviaciones axiales del tobillo como el pie cavo-varo obligan a una dirección de tracción que fuerza más unas fibras, en este caso las de inserción externa, que otras.
La hiperpronación por una talonera muy blanda.
La marcha y carrera en cuestas hacia arriba estiran continuamente el tendón forzando sus límites de elasticidad.
La presión directa sobre el tendón como ocurre con el calzado de contrafuerte rígido.
Músculos y tendón de Aquiles tensos en la pantorrilla
El tendón de Aquiles se puede romper cuando se comienza una actividad de golpe. Por ejemplo el tendón se puede romper cuando uno salta o empieza a correr
La llegada al mercado de una gran variedad de calzado que muchas veces está diseñado en función de la mejora deportiva y no del confort o la protección del deportista frente a la lesión.
SINTOMAS
El dolor es el signo principal. El paciente describe un dolor insidioso por la mañana, al levantarse y dar los primeros pasos, que desaparece total o parcialmente con la marcha y que vuelve con mayor intensidad durante y después de la actividad física. Conforme pasa el tiempo, el dolor se hace más constante, incluso permanente, impidiendo la práctica deportiva.
La inflamación causa dolor en la parte trasera de la pierna, cerca del talón. Esta inflamación normalmente es transitoria. Con el transcurso del tiempo generalmente se transforma en una degeneración.
Dolor dentro del tendón—dolor moderado, rigidez, hinchazón o laxitud. Esto puede ocurrir en cualquier parte a lo largo del tendón, comenzando desde el área estrecha directamente sobre el talón, hacia arriba, a la región directamente debajo del músculo de la pantorrilla. Frecuentemente el dolor se presenta antes de levantarse en la mañana o luego de períodos de descanso, se mejora un poco con el movimiento pero empeora luego con el incremento de actividad.
Laxitud o incluso en algunos casos dolor intenso cuando se oprime los costados del tendón. Sin embargo, la laxitud es menor cuando la presión actúa directamente sobre el dorso del tendón.
Cuando el trastorno se transforma en degeneración, el tendón puede dilatarse y desarrollar nódulos en el área donde el tejido está dañado.
DIAGNOSTICO
La palpación es dolorosa. Se recorre pinzando con dos dedos el tendón en todo su recorrido, buscando el punto más doloroso y la presencia de nódulos que lo engrosen. Se puede completar repitiéndola mientras el paciente realiza movimientos de contracción muscular y de flexo-extensión del pie.
Se deduce por los datos del interrogatorio y exploración y por el resultado de las pruebas complementarias que actualmente se han reducido a dos: la ecografía y la Resonancia Magnética.
Para diagnosticar una tendinitis o tendinosis aquilea, el médico examina el pie y el tobillo del paciente y evalúa el rango de movimiento y la condición del tendón. El alcance de la condición puede ser evaluada además mediante rayos-X y ultrasonido
TRATAMIENTO
La duración de la recuperación depende de muchos factores, como su edad, salud y si ha tenido una lesión anteriormente. El tiempo de recuperación depende también de la severidad de la lesión. Un tendón que está sólo levemente inflamado y que recién comenzó a doler puede mejorar en unas pocas semanas. Un tendón significativamente inflamado y que ha estado doliendo por mucho tiempo puede tardar hasta algunos meses en mejorar. Tiene que dejar de realizar las actividades que causan el dolor hasta que el tendón haya cicatrizado. Si continúa realizando actividades que causan dolor en el tendón, sus síntomas volverán a aparecer y tardará más tiempo en recuperarse.
El tratamiento de elección es conservador, relegando el quirúrgico al fracaso del mismo. Ante la aparición de los primeros signos de tendinitis, se debe parar cualquier tipo de actividad deportiva y aplicar un tratamiento antiinflamatorio, con medicación y aplicación de frío local.
Comenzará entonces un proceso de investigación de las causas pre-disponentes:
• Anatómicas. Desviación axial del talón, detección de un pie pronador, un pie cavo o plano, un talón varo o valgo, la presencia de un Haglund por desarrollo excesivo de la tuberosidad del calcáneo, etc.
• Deportivas. Estudio del calzado, de la consistencia de la suela y del contrafuerte. Consideración de la superficie de entrenamiento y competición, sobre todo de su dureza y adherencia. Reflexión sobre los sistemas de entrenamiento, gestos técnicos, estiramientos incontrolados, ejercicios excesivos con pesas, etc.
• Causas de origen sistémico, como reumatismos, procesos infecciosos, metabólicos y alteraciones musculares o neuromusculares.
El tratamiento abordará entonces la corrección de esas causas
• Modificando los sistemas de entrenamiento, los malos gestos técnicos, el calzado y las superficies para la práctica deportiva.
• Mejorando el apoyo plantar y compensando los defectos anatómicos con plantillas a medida.
Fisioterapia
Los métodos de tratamiento para la tendinitis aquilea se seleccionan en base a la antigüedad de la lesión y el nivel de daño provocado al tendón.
En la etapa inicial, cuando se produce una inflamación (considerable) repentina, se puede recomendar una o más de las siguientes opciones:
• Inmovilización. Para la inmovilización puede utilizarse una bota de yeso o removible para reducir el esfuerzo sobre el tendón de Aquiles y facilitar la sanación.
• Hielo. Para reducir la hinchazón por inflamación, aplicar una bolsa de hielo con una toalla fina sobre el área afectada durante 20 minutos por cada hora de actividad. No colocar el hielo directamente sobre la piel.
• Medicación vía oral. Los medicamentos anti-inflamatorios no esteroides (NSAID), como Ibuprofeno, pueden colaborar para reducir el dolor y la inflamación en la etapa inicial de la condición.
• Terapia física. La terapia física puede incluir ejercicios de fortalecimiento, masaje/movilización de tejidos blandos, reeducación de la forma de caminar y correr, estiramiento y terapia de ultrasonido.
Si los procedimientos no-quirúrgicos no logran restablecer la condición normal del tendón, podría ser necesaria la cirugía. El cirujano especialista en pie y tobillo indicará el mejor procedimiento para reparar el tendón.
Recomendaciones terapéuticas:
• Colóquese hielo sobre el tendón de Aquiles por 20 ó 30 minutos cada 3 ó 4 horas durante los primeros 2 ó 3 días o hasta que el dolor desaparezca.
• Levántese la pierna cuando esté acostado, apoyándola sobre una almohada.
• Tome los medicamentos antiinflamatorios recetados por su profesional médico.
• Su profesional médico le puede indicar que use una plantilla en el zapato para levantar el talón hasta que se haya sanado, o quizás por más tiempo. Al elevar el talón se evita que el tendón de Aquiles se estire más.
• Mientras se está recuperando de la lesión, practique un deporte o actividad que no empeore su situación. Por ejemplo, nade en vez de correr.
• Haga todos los ejercicios indicados por su profesional médico para estirar y fortalecer el tendón de Aquiles.
• Si tiene pronación excesiva, su profesional médico le podrá indicar que use plantillas especiales, llamadas ortosis, que le ayudarán a estabilizar el pie.
• Si tiene pronación excesiva, su profesional médico le podrá recomendar que use plantillas especiales, llamadas ortosis, que le ayudarán a estabilizar el pie. Puede comprar las plantillas en la farmacia o en una tienda de artículos deportivos, o también las puede encargar a medida.
• En algunos casos graves de tendinitis de Aquiles, es posible que le coloquen un yeso en el pie durante varias semanas.
• Cuando el tendón se desgarra, es posible que haya que operarlo. Si no, es posible que deba usar un yeso en el pie durante 6 a 10 semanas.
PREVENCION
Para evitar que se repita la tendinitis de Aquiles después de un procedimiento quirúrgico o un tratamiento no-quirúrgico, el cirujano de pie y tobillo puede recomendar el fortalecimiento y estiramiento de los músculos de la pantorrilla a través de ejercicios diarios. Para prevenir la reiteración de este trastorno también es importante utilizar el calzado adecuado para el tipo de pie y de actividad.
• La prevención es importante, puedes evitar esta condición conservando la fortaleza y la flexibilidad de los músculos de la pantorrilla.
• Debes procurar hacer ejercicios de calentamiento antes de empezar con una rutina de ejercicio y realizar ejercicios de relajación o enfriamiento al terminarlo.
• Procura no hacer ejercicios bruscos y sin calentamiento, si no practicas ejercicio regularmente, este tipo de tirones pueden lesionar o romper el tendón.
• Si tienes sensación de dolor o inflamación en la pantorrilla, evita caminar en subidas pronunciadas.
• Cualquier molestia o dolor, debe ser atendido por tu médico traumatólogo de inmediato.
No olvides que la prevención y detección a tiempo pueden ayudarte a vivir mejor
REGRESO A LA ACTIVIDAD DEPORTIVA
Cada persona se recupera de su lesión a un ritmo diferente. Su vuelta al nivel de actividad que realizaba anteriormente dependerá de la recuperación de su tendón de Aquiles, y no de cuántos días o semanas han pasado desde que se produjo la lesión. En general, cuánto más tiempo tarde en iniciar su tratamiento después de tener síntomas, más tiempo tardará en sanarse. El objetivo de la rehabilitación es que pueda volver a realizar sus actividades normales lo más pronto posible. Si vuelve a sus actividades normales antes de tiempo, puede agravar su lesión.
Podrá retornar al deporte o actividad en forma segura cuando pueda hacer lo siguiente, en el orden en que aparece en la lista:
• Puede mover la pierna lesionada en todas las direcciones de la misma manera que la pierna que está sana.
• Tiene la misma fuerza en la pierna lesionada que en la pierna que está sana.
• Puede caminar en línea recta sin sentir dolor ni renguear.
Copyright © 2015 Revista Go&Run