Texto publicado por Joana Gonzalez

No pierdas la esperanza

Cuatro velas estaban ardiendo calmadamente

El ambiente estabba tan silencioso que se podía escuchar el diálogo entre ellas .

La primera dice: Yo soy la paz y a pesar de mi luz , las personas no consiguen mantenerme ensendida. En seguida su llama lentamente se apagó totalmente.

La segunda dice: yo me llamo Fe

Lamentablemente soy superfa para las personas.

Ellass no quieren saber nada de Dios, por eso no tienesentido seguir ardiendo y al terminar su charla un leve viento sopló sobre ella y se apagó.

Muy bajo y triste la tercera vela se manifestó:

Yo soy el amor, no tengo mas fuerzas para arder. Las personas me dejan de lado, porque las personas sólo logran mirarse entre ellas, se olvidan hasta de aquellos que están a su alrededor. Y también se apagó.

De repente llegó un niño y vio las tres velas apagadas…

Qué es esto, ustedes deben permanecer encendidas y arder hasta el fin .

Entonces la cuarta vela habló:

No tengas miedo hijo, mientras yo esté encendida podremos encender las otras velas

Pausa para la reflección

Cuando apagamos las llamas de la paz, la fe y el amor aúin así no todo está perdido alguna cosa ha de quedar dentro de la gente y eso debe ser preservado, ensima de todo…

Entonces el niño toma la vela de la esperanza y encendió las otras que estaban apagadas

Que la luz de la esperanza nunca se apague dentro de ti. Ella es nuestra luz al final del túnel.

El camino de la felicidad, precisa antes ser pavimentado con la esperanza

Paz, amor, fe y esperanza

La felicidad no siempre golpea nuestra puerta

Para tenerla es preciso buscarla incesantemente y al encontrarla tener el corage de meterla dentro de nosotros buen día