Texto publicado por Carinosanto
A TODOS NOS HA ATACADO ALGUNA VEZ
EXTREÑIMIENTO, TIPS.El estreñimiento es una molestia que afecta a una de cada cuatro personas, aunque su severidad es variable y es claro que con la edad tiende a complicarse.
De acuerdo con William Otero, gastroenterólogo de la Universidad Nacional, después de los 65 años la incidencia es un poco mayor, especialmente en personas con estilos de vida sedentarios, un nivel socioeconómico bajo y que sufren algunas enfermedades.
Iván Darío Escobar, endocrinólogo, advierte que la base del problema es la alimentación, por lo que recomienda aumentar el consumo de fibra, presente en verduras, frutas y granos integrales.
1. ¿Qué es el estreñimiento?
No es una enfermedad, es un síntoma caracterizado por menos de tres deposiciones a la semana, pero también pueden ser evacuaciones duras, sensación de deposición incompleta y con esfuerzos excesivos. Para muchos es no poder ir al baño cuando se quiere.
2. Factores de riesgo
El estreñimiento puede darse con mayor frecuencia en la niñez o edades avanzadas, por la inmovilidad, dieta inadecuada, cirugías recientes, toma de laxantes, viajes o embarazo.
3. ¿Cómo se previene?
Cada persona debe conocer su cuerpo y su frecuencia intestinal. También se debe tener una dieta equilibrada, rica en fibra. Tomar líquidos suficientes. Hacer ejercicio regular. Ir al baño con tiempo, sin dejarlo para después. No automedicarse.
4. ¿Cómo diagnosticarlo?
Es clínico, basado en la historia del paciente y en el examen médico. Puede requerir radiografías y endoscopias para detectar alteraciones anatómicas y en algunos casos, medición de presiones, análisis muscular o biopsias de tejidos intestinales bajos.
5. Signos de alarma
Si además del estreñimiento existe alguno de estos síntomas, es urgente consultar: comienzo reciente y súbito, anemia, pérdida de peso, deposiciones con sangre, dolor severo, cambio en la frecuencia y consistencia de deposición.
6. En casos especiales
En el embarazo: el tratamiento es con dieta, líquidos y ejercicio. No use laxantes sin recomendación médica.
Con los niños: revise la hidratación y la frecuencia de consumo de leche. Ante el primer síntoma consulte y no use laxantes por cuenta propia.
En diabéticos: evite el consumo de laxantes con lactulosa y sorbitol, porque alteran el nivel de azúcar.
En viajes: aumente el consumo de frutas, verduras y agua.
En el posoperatorio: además de mejorar la dieta, cuando sea posible inicie una terapia de movilidad en la cama con fisioterapia.
7. ¿Qué lo produce? 1
Pueden ser causados por trastornos del movimiento intestinal, generado por factores psiquiátricos (depresión), nutricionales (bajo consumo de fibra y de líquidos), farmacológicos (consumo de opioides), tránsito lento, intestino irritable y algunas enfermedades como el párkinson o patologías de la médula.
8. ¿Qué lo produce? 2
También es causado por problemas del piso pélvico, puede haber disfunción en la contracción de los músculos de la pelvis o disinergia del esfínter externo. También puede ser secundario a obstrucciones por prolapso (salida rectal), salida del intestino, tumores, inflamaciones, estrechez intestinal o fisuras rectales.
9. Tratamiento
Es sintomático e incluye varias recomendaciones. Lo primero es una dieta rica en fibra y una buena hidratación, así como ejercicio regular y fisioterapia del piso pélvico. En caso de que esto falle, acuda al médico; seguramente, este le puede recomendar algún tipo de laxante.
10. Laxantes con recomendación médica
Son de varios tipos: formadores de masa (aumento del volumen fecal): el psyllium, el policarbofilo y la metilcelulosa. Lubricantes (facilitan el tránsito) como el aceite mineral. Estimulantes (actúan sobre los nervios del colon): el bisacodilo, la cáscara sagrada y el ruibarbo. Osmóticos (retienen líquidos): el magnesio, la lactu celulosa y el sorbitol. Por último, los supositorios de glicerina.
Fuente: World Gastroenterology Organisation Global Guidelines