Texto publicado por Carinosanto

¡ME ATACÓ LA PESTE !

Me atacó la peste / Le tengo el remedio
Aislarse, calditos y no automedicarse, consejos para superar una gripa.
El martes amanecí con un dolorcito de garganta que a mediodía ya se había convertido en ronquera con moqueadera.
Pero esos síntomas eran nada frente a lo que siguió. Un escalofrío intenso y un dolor que iba desde la cabeza hasta los pies antecedieron a una debilidad mayúscula.

Ahí me autodiagnostiqué: tengo una virosis, la misma que está botando a la cama a miles de personas por estos días.
Me acordé de los pacientes y de todas las recomendaciones que uno les da para lidiar con lo que ellos mismos llaman ‘la peste’. Aquí recojo algunas.

No se automedique. Rectifico parcialmente en este punto; en medio de semejante moridera se vale ayudarse con un analgésico común que alivie un poco y un antihistamínico.

Agua. Es bendita y necesaria, pero les confieso que a uno no le entran más de tres vasos de agua pura, y sobre todo con esa maluquera. A eso hay que meterle limoncito o panela y hacer juguitos. ¡Ah!: ni en este caso admito las gaseosas.

Cama. Quien diga que puede ir a trabajar en este estado tan lamentable está 'chicaneando'. Este virus ataca a mansalva y aniquila la existencia. No hay modo de lidiar con esta “peste” si no es con un par de días de reposo. Tanta valentía es bobada.

Calditos. Comprobado, son poderosos; el de pollo es terapéutico. Los expertos dicen que eleva las defensas, refresca y afloja las mucosidades.

Aislarse. Es una maravilla, no solo porque usted no quiere ni que le hablen, sino porque evita contagiar a otros.

Por último. Apague el teléfono, ignore el computador, no se amargue con noticieros y duerma cuanto pueda. Camine un poco, pero no se sobreactúe. ¡Ah!: y como yo, aguántese las ganas de tomar antibióticos, porque para la gripa no sirven.

Estoy saliendo de una Laringitis y Faringitis aguda, aún no puedo hablar, pero Gracias a Dios si puedo escribir.

Dios les Bendiga por Siempre!

Gloria.