Texto publicado por Claudia Alonso Menéndez
No va a ser fácil.
Si tenemos en cuenta las agónicas victorias que hemos tenido en este eurobasket salbo la balsámica de Turquía que es la que nos ha hecho pasar, los augurios no son nada buenos para los de Scariolo.
Siempre que todo se desarrolle como debe, nuestro camino para llegar a la final en el que nos las volveríamos a ver con Serbia es el siguiente:
Sábado polonia, martes grecia y ya luego francia.
Cualquiera puede comprobar, que pasar segundo tiene un precio alto, y que del mal el menos.
Pero a falta de confirmación, si no pasamos los cuartos, hay que jugar preolímpico.
Lo que nos da más presión, pues España quería este europeo para evitar juegos, y para coger buenas sensaciones de cara a la olimpiada, que sería el próximo reto a conseguir, ya que es lo único que nos falta.
A los polacos ya les ganamos con un excepcional partido de Mirotic, pero nada va a tener que ver ese partido con el que se avecina, pues aquí todos quieren su parte del pastel y nadie nos va a regalar nada.
Ayer con los germanos, tuvimos un sensible mejor porcentaje de tres, pero nos sigue faltando cerrar los partidos con dureza y mala leche, y eso te puede pasar factura con Spanoulis, Borousis y compañía a los que les encanta amargarnos la fiesta.
No lo tendrán fácil tampoco nuestros compañeros de viaje, ni italianos ni turcos, los serbios evidentemente tienen un cuadro mucho más uave que el nuestro, pues pasar primero tiene un precio mucho más bajo que hacerlo segundo o tercero.
Lo mejor para España esque Rudi se recupere pronto, pues si bien en ataque ya no las está metiendo por el momento como lo hacía en la preparación, en defensa es un seguro que no debemos perder si queremos pasar.
El camino se presume duro, pero igual que hemos estado apollando cuando todo parecía perdido, hay que estar con ellos hasta el final, nunca os dejaremos solos y siempre estaremos apollando a un equipo que nos ha dado muchas alegrías, y que no se merece falta de apollo, ahora que vienen peores tiempos.
Podemos hacerlo. Y juntos, será más fácil.